Un total de 178 jugadores se dieron cita en el Golden Sun Casino del Hotel Antunovic, Zagreb, Croacia, para tratar de hacerse con el título. Sin embargo, después de varios días de intenso poker, solo 8 seguían en pie.

Los finalistas volvieron ayer al tapete para jugar hasta conocer un campeón. Su nombre, ahora ya lo sabemos, es Alija Filipovic.

Pero al inicio de la caeerar, Dragan Galic era sin duda el favorito del público y de la prensa, tras haber amasado en su carrera más de 1,2 millones de dólares en ganancias en torneos en vivo. Además, Galic llegó a la final como líder de fichas, con casi el doble que su más inmediato perseguidor. En los primeros niveles, el jugador croata no hizo más que ampliar dicha ventaja,

La agresión de Galic le jugó una mala pasada cuando quedaban cuatro jugadores. Mate Mecs, con un stack peligroso, se dobló contra el croata tras ligar en el flop un trío de damas. Galic le entregó buena parte de sus fichas.

Galic estaba en problemas, pero sería Nikolay Bibov quien partiría antes. El búlgaro, siempre con gafas de sol, perdió un cara o cruz contra Galic y acabó en una cuarta posición valorada en 13.450 €.

Galic no se iría sin luchar y, en juego three-handed empujó su resto en busca de un double-up. Filipovic le estaba esperando con as diez y pagó para echar al favorito del público en tercera posición. Se llevó por ella 16.400 €.

Con el croata eliminado, Mecs y Filipovic se enfrentarían cara a cara por el título (no sin antes alcanzar un pacto). Filipovic ostentaba una ventaja de 3 a 1 al inicio del heads-up pero su rival, eventualmente, logró igualar las pilas.

Pero para Filipovic eso era solo el calentamiento. Una serie de grandes botes le catapultaron hacia la cima de nuevo. Desde ahí asestaría el golpe de gracia a Mecs, con A-K por el K-J del húngaro, que se embolsó 32.000 €.

Alija Filipovic se coronó así campeón del Eureka Poker Tour de Croacia. Se llevó un premio de 42.700 € así como los aplausos y el respeto de todos los, presentes en el casino, le vieron conquistar el trofeo.

«Sienta estupendamente», dijo, aproximadamente.

Desde aquí, nosotros también le damos la enhorabuena.

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