Casino Estoril: el Juego en el Templo del Motor

Seguro que muchos fanáticos de la Fórmula 1 asociarán el nombre de la localidad portuguesa con el circuito que vio a pilotos como Michael Schumacher, Ayrton Senna o Alain Prost, entre otros, en las décadas de los 80 y 90. Pero Estoril también es un destino famoso para todos los amantes del juego, ya que alberga el casino más grande de Europa.

El Casino Estoril: ¿dónde está?

El gran éxito del Casino Estoril también se debe a que cuenta con una ubicación muy favorable. La zona es conocida por ser un famoso balneario que disfruta de una ubicación privilegiada frente al océano Atlántico con distintas playas. Justo enfrente del casino, se encuentra la playa de Tamariz y sus piscinas oceánicas, un destino turístico muy conocido.

Es una ciudad costera que ofrece todas las comodidades y facilidades posibles, además de contar con todo tipo de conexiones con la cercana Lisboa, que está a solo veinte kilómetros de distancia, pero sin el caos y la agitación de la capital.

Historia del casino

La construcción del Casino Estoril comenzó en 1916, pero fue durante la Segunda Guerra Mundial cuando el lugar adquirió su fama, hasta el punto de convertirse en una fuente de inspiración para Ian Fleming y su saga de 007 con su Casino Royale (probablemente debido a que fue el escenario de muchas aventuras de espías de todos los frentes y de la alta nobleza de la época).

Posteriormente, se llevaron a cabo trabajos de ampliación a principios de la década de los 60, hasta convertirse en lo que es hoy: el casino más grande de Europa.

Servicios del casino

La majestuosidad de este lugar se puede apreciar desde el hermoso jardín que recibe a sus visitantes: cuenta con una extensión de más de doscientos metros y una enorme fuente justo frente a la entrada.

En los alrededores del jardín, se encuentran algunos de los mejores hoteles de cinco estrellas de la zona: el Palacio Estoril Hotel Golf & Wellness, el Palacio Estoril Golf & Spa o el Hotel Villa Galé, por mencionar solo algunos.

También alrededor del parque, hay numerosas opciones para ir de compras, a comer u a hacer otras actividades que convierten esta área en un verdadero centro neurálgico de la localidad (oficina de correos, bancos, farmacia, comisaría de policía, entre otras).

Además, cuenta con amplias zonas de aparcamiento (incluyendo uno enorme cerca del casino) y paradas de autobús justo en la calle más cercana (con vistas a la playa).

Oferta de juego

Si bien Estoril es una localidad balnearia que hay que aprovechar al máximo en todas sus facetas, los amantes del juego seguro que no dejan pasar la oportunidad de visitar el casino, que ofrece un espacio enorme y una amplia variedad de opciones.

Hay una gran cantidad de mesas físicas que con casi todos los juegos clásicos: ruleta, blackjack, póker caribeño, punto y banca e incluso un juego típico portugués llamado «Banca Francesa», que se juega con tres dados.

También hay espacio para el póker (con una sala con mesas de dinero en efectivo y algunos torneos organizados) y, por supuesto, las imperdibles máquinas tragaperras, con más de mil máquinas en las diferentes salas.

Gastronomía y eventos

Si bien es cierto que alrededor del casino se pueden encontrar todo tipo de opciones culinarias, dentro del casino también hay algunas propuestas gastronómicas que no te puedes perder.

El buque insignia probablemente sea el «Estoril Mandarim», uno de los mejores restaurantes de cocina cantonesa del mundo, pero también está el «Bistro», que ofrece la posibilidad de degustar comida típica portuguesa, o el «Zeno Lounge», donde se ofrece una cocina más fusión con especialidades que van desde recetas brasileñas hasta italianas (no podía faltar la pizza).

Dentro del casino también hay espacios para espectáculos y exposiciones. Hay distintos lugares que siempre están acogiendo actividades y eventos: desde los quinientos metros cuadrados de la galería de arte, hasta los 910 asientos de las salas Negra y Plateada, pasando por los 350 del auditorio o la discoteca Jezebel, con otros 500 metros cuadrados de música y cócteles.